AVIONES DE COLORES - COMETAS
En algún momento de la vida, casi todo el mundo ha cruzado corriendo un parque o un campo sujetando una cometa por su hilo mientras volaba alto en el cielo. Este es un recuerdo divertido que puede hacer que la gente vea las cometas simplemente como juguetes recreativos para niños. Pero las cometas son, y siempre han sido, mucho más que los lindos y coloridos artilugios que se ven comúnmente hoy en día. Tienen una historia larga e interesante, y su creación ha dado lugar a hallazgos que han desempeñado un papel importante en el avance de la tecnología moderna. Una comprensión profunda de las cometas, desde cómo funcionan hasta los roles que han desempeñado en el pasado, puede aumentar la apreciación de su propósito y, en última instancia, el disfrute de ellas.
Muchos creen que las primeras cometas vinieron de China hace más de 2,000 años. Si bien es una creencia popular que las cometas se originaron en China, no todos la comparten. Algunos creen que es posible que también se hayan utilizado cometas en Indonesia o Malasia. Aunque no está claro exactamente cuándo se utilizaron cometas en estas áreas, los registros indican que su propósito era pescar. Esto se hacía colocando un cebo y una red en la cola de la cometa para atrapar y retener peces. La documentación más antigua respalda a China como el lugar donde se crearon las cometas por primera vez. En algún momento entre el 468 y el 376 a.C., un filósofo llamado Mo Di o Mo-tse vivió en el monte Lu, donde creó un águila de madera que pudo hacer volar durante un día. Su diseño fue posteriormente mejorado por Gongshu Ban, su alumno, quien creó una urraca de bambú y seda. Gongshu Ban pudo volar su cometa continuamente durante tres días.
Las primeras cometas eran grandes y se utilizaban con fines militares. Algunos se utilizaban para difundir propaganda, mientras que otros podían transportar individuos para observar los movimientos del enemigo o actuar como francotiradores. Algunas cometas eran famosas, incluso aquellas que no lograban los resultados deseados. Por ejemplo, en Nanjing, el emperador Wu Di intentó una vez, sin éxito, enviar un SOS a través de una cometa. Otro ejemplo del uso militar de una cometa fue cuando el general Han Hsin voló una cometa sobre el castillo de su enemigo y luego usó la longitud de la cuerda como medida para cavar un túnel. Los chinos llaman a las cometas "fengzheng", que puede traducirse como "arpa de viento". Este nombre proviene de una época en la que las cometas estaban equipadas con piezas de bambú que vibraban y emitían un sonido cuando las agitaba la brisa.
Las cometas finalmente llegaron desde Asia a otras partes del mundo, concretamente a Europa, cortesía de Marco Polo. Desde Europa, la cometa eventualmente llegaría a América. Fueron utilizados no sólo con fines militares sino también científicos. En 1749, Alexander Wilson, un astrónomo y meteorólogo escocés, hizo su primer intento de utilizar cometas para medir la temperatura del aire. Algunos de los otros usos científicos pasados de las cometas incluyeron a Benjamin Franklin volar una cometa hacia una nube de tormenta a mediados del siglo XVIII.
Las primeras cometas se utilizaban en ocasiones para transportar hombres con fines militares y, como tales, podrían considerarse una de las primeras formas de transporte aéreo. Esto se exploró más seriamente en 1894 cuando Lawrence Hargrave conectó cuatro cometas celulares y, con la adición de un asiento tipo cabestrillo, pudo volar aproximadamente 16 pies. Como resultado, su uso de cometas fue un paso exitoso hacia la creación de aviones tripulados. Durante la Segunda Guerra Mundial, las cometas se utilizaron para prácticas de tiro antiaéreo.
Una cometa requiere viento, lo que crea una presión que levanta o empuja la cometa. Sin viento, no hay sustentación y la cometa caería. Debe haber suficiente sustentación para combatir la fuerza descendente de la gravedad y la resistencia del viento en la cola y la superficie de la cometa, lo que se conoce como resistencia. Para crear sustentación, la presión del aire debajo de la cometa debe ser mayor que la presión del aire arriba. Esto se puede lograr con vientos rápidos o cuando la cometa se mueve a una velocidad suficientemente alta. Esto último se puede lograr andando en bicicleta o corriendo y arrastrando la cometa.
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